El sexo y la sexualidad después de los 60 años
En general, se acepta que la vida sexual es para hombres y mujeres jóvenes. Con el fin de satisfacer sus necesidades fisiológicas, los jóvenes mantienen relaciones sexuales de forma activa y, al llegar a la vejez, abandonan totalmente los contactos íntimos.
Sin embargo, los expertos de los países desarrollados del mundo creen que no hay que poner fin a las relaciones sexuales en la vejez. Por lo general, al menos el 40% de las personas mayores desean tener una vida sexual regular.
Según un estudio conjunto realizado por varias instituciones de investigación alemanas, como la Universidad Humboldt de Berlín y el Centro Clínico Charité, casi un tercio de las personas de entre 60 y 80 años tienen una vida sexual activa y disfrutan tanto como los jóvenes de entre 20 y 30 años. Sin embargo, para la mayoría es un tabú y la gente rechaza la intimidad cuando llega a la vejez.
¿Cuál es el problema de la disminución de la actividad sexual después de los 60?
El envejecimiento natural del cuerpo, tanto del hombre como de la mujer, está relacionado con una serie de los cambios fisiológicos.
Las mujeres pasan por los períodos de la menopausia y la posmenopausia. Durante la posmenopausia, los actos sexuales pueden causar ardor y dolor porque las glándulas responsables de la lubricación ya no funcionan como antes. La sequedad de los genitales causa molestias, por lo que las mujeres tienen miedo de tener intimidad. Sin embargo, la toma de fármacos adicionales, como las hormonas, el Viagra para mujeres ayuda a superar estos síntomas. Con respecto a este problema, puede consultar a un ginecólogo para que resuelva su problema.
Los hombres también pasan por una fase natural de envejecimiento, que puede ir acompañada de la llamada "menopausia masculina". Ante la disminución de la testosterona y las enfermedades del sistema cardiovascular, la función eréctil empeora. Muchos hombres se avergüenzan de este problema y se abstienen de tener intimidad, aunque desean tener relaciones sexuales. Sin embargo, no es un problema. Hay más de 30 medicamentos diferentes en el mercado (totalmente sin peligro para el organismo), que permiten superar este problema.
Según la opinión de los expertos médicos, la necesidad de intimidad y disfrute no disminuye con los años. También después de los 65 años, la salud sexual sigue siendo un aspecto importante del bienestar psicológico y físico.
Seguir teniendo una vida sexual satisfactoria en la madurez es el resultado de una relación con la pareja basada en la confianza y una buena salud.
Hay que dedicar a los problemas psicológicos, que suelen ser el motivo de las disfunciones sexuales, tanto tiempo como a los fisiológicos. Por eso, es necesario visitar a un psicólogo y/o a un sexólogo en caso de problemas en la esfera sexual, pero no solo, sino junto con su pareja sexual.
Hoy día, no existe casi ninguna patología sexual que no pueda ser tratada por la medicina. Por eso, no se avergüence de su sexualidad y su deseo natural. El sexo no es únicamente una función reproductiva para la continuación de la vida. Es una necesidad fisiológica que prolonga la vida y la mejora, especialmente después de los 60.